Quizá el acto de graduación al que asistimos el viernes sea uno de los más emotivos de los muchos que hemos vivido a lo largo de nuestra experiencia profesional.
Se gradúan dos de los alumnos más especiales y queridos de nuestro Centro.
Belén e Ismael.
No recogieron ningún graduado en ESO, ni titularon en Bachillerato o en Ciclo alguno, se graduaron en buenas personas, en alumnos que han demostrado que saben luchar contra las limitaciones con las que les tocó vivir. Que saben sacar lo mejor que tienen y hacer que los que hemos tenido la suerte de estar a su lado todos estos años, hayamos podido disfrutar de sus sonrisas espontáneas y sanas, de su candidez de niños grandes, de su alegría de vivir.
Desde aquí os queremos dar las gracias.
Gracias de gente ruda y curtida como el personal laboral que trabaja en la explotación agraria de nuestro centro, con quienes habéis compartido experiencias en el huerto ecológico y que ese día dejaban escapar un poco de ese gran corazón que esconden, en unas lágrimas llenas de emoción y sentimiento. Gracias de los Pacos Osunas, Anas, "Carolinos", abuelo ..
Gracias de Anabel, Paco y Susana, y de otras Susanas anteriores por habernos permitido ser una herramienta más en vuestro camino.
Gracias de vuestros padres, por haberles ayudado a tapar sus miedos con capas de orgullo y satisfacción.
Gracias de esas abuelas a las que devolvisteis el brillo en sus ojos gastados.
Gracias de todos vuestros compañeros a los que, con vuestra espontaneidad, habéis hecho menos rutinario el día a día de los pasillos.
Os podía decir la típica frase de desearos que seáis felices, pero creo que no es necesario, la sonrisa que mostráis lleva adosada una gran dosis de felicidad, espero que no la perdáis nunca.
